Especialista remarca que con este reglamento se rompe con un sistema de 30 años de antigüedad.
El nuevo reglamento de transporte urbano de Lima no implica erradicar a los cobradores de los buses, al prohibirles que griten para llamar a los pasajeros, pero sí les asigna un rol más pasivo y de orientación del usuario, aseguró un funcionario de la comuna limeña.
Los cobradores deberán ser los que informen y guíen a los pasajeros respecto a las rutas y paraderos, pero, de ninguna manera, pueden llamar a los usuarios de manera estridente en cada esquina, indicó el asesor de la Gerencia de Transporte Urbano (GTU) del municipio, Joaquín Vásquez.
“Muchas empresas son titulares de las autorizaciones, pero no tienen vehículos. Por ello, tercerizan el servicio a los propietarios de las unidades, quienes contratan a choferes y cobradores y estos ganan en función de los pasajeros recogidos, por eso compiten”, dijo.
Ahora, las empresas tendrán sus propias flotas de vehículos o las arrendarán, mediante el sistema financiero, y contratarán a sus choferes y cobradores, quienes estarán en planilla y con todos sus derechos laborales.
Vásquez informó también que la comuna metropolitana emprenderá una campaña de sensibilización con el público usuario para que conozca sus derechos y sus obligaciones, con el fin de evitar que se cometan infracciones por desconocimiento.
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