Un humilde padre
e hijo fueron asesinados a balazos en medio de una presunta venganza.
El violento episodio ocurrió a la altura de la cuadra 21 de
la avenida Belaunde, en el AH Carmen Alto, en el distrito de Comas donde los
vecinos están cansados de los delincuentes, los asaltos y las riñas
callejeras.
El taxista Víctor Hugo Ochoa Tapahuasco (35)
y su hijo Anthony Bryan Ochoa Sulca (18) dejaron
de existir cuando eran trasladados a un centro asistencial.
Peritos en criminalística revelaron que un proyectil
atravesó la clavícula izquierda, cerca al corazón, del taxista.
El menor fue impactado por dos balas en el pecho y en el
brazo derecho.
Padre e hijo se desplazaban en el auto Hyundai A8D-655 que
conducía Víctor Hugo. La esposa de este, Vania Milagros Sulca Fuentes, lo
acompañaba a él y al hijo de ambos.
Según las primeras investigaciones, la familia asistió desde
la víspera a una 'pollada' donde se encontraba el oficial de mar de tercera
Brian Junior Ángeles León (23). Según testigos, el marino habría faltado el
respeto a Vania Milagros, tratando de cortejarla.
Muertos y heridos
El drama de la familia se desató después de las 6:00 a.m. en
la calle Las Delicias. Fue cuando al pasar por una bodega volvieron a
encontrarse con un grupo de jóvenes entre los que estaba Ángeles León. Tras una
breve discusión se produjo un confuso, pero mortal tiroteo.
Anthony Ochoa –ex interno de 'Maranguita'– fue alcanzado por
dos proyectiles. Su padre lo rescató y lo subió a su auto, pero en el intento
por escapar terminaron estrellándose contra una vivienda.
Aún con vida, padre e hijo fueron subidos a un taxi pero el
transportista no logró avanzar mucho. Ambos habían dejado de existir.
En el carro de Víctor Hugo Ochoa se encontraron varios
casquillos de bala. La propietaria de la casa donde se incrustró el carro,
María Sánchez Zapata, también resultó herida de bala.
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