Una lucha desde
junio del año 2013 vienen sosteniendo los vecinos del Asentamiento Humano IV
Sector “El Progreso” en contra de la Municipalidad de Carabayllo.
El tema de
la disputa es la imposición por parte del alcalde dicha comuna, Rafael Álvarez
de llevar a cabo un “proyecto” que consiste en la instalación de una “Planta de
tratamiento de aguas residuales” en perjuicio del parque Jorge Chávez. Tal
barbaridad no contaría con sustento técnico ni con un adecuado estudio de
impacto ambiental, además de desvirtuar el origen del terreno, el cual está
destinado, según Escritura Pública PO1177071, para uso exclusivo de parque o
jardín.
La planta de tratamiento de aguas residuales comenzó a construirse
en junio de este año. Los vecinos lo impidieron e incluso cubrieron las zanjas
donde instalarían las pozas.
“Se nos quiso engañar
diciéndonos que esto sería la construcción del Parque Jorge Chávez, que estamos
necesitando, en el transcurso del último mes de Junio nos enteramos que se
estaba construyendo una planta de aguas residuales”, denunció Raúl Tinco
Llallahui, secretario general del IV Sector.
Herculano Calero Durand,
subsecretario general de dicha zona confirma que el proyecto no cuenta con sustento
técnico ni estudio de impacto ambiental, además de amenazar el centro de salud
y los centros educativos que rodean el predio. “Para hacer esta obra no han
hecho cambio de uso, esto está destinado a áreas verdes, no han cumplido con
los requisitos como lo ha indicado un estudio del Colegio de Ingenieros, y que
les hace las observaciones. Si no lo hubiéramos parado, esto seguiría,
afectando la salud de la población, por la cercanía de la posta y por todos los
colegios que se encuentran alrededor”, detalló.
Múltiples son los pedidos que
han hecho los pobladores, entre los que se incluyen un oficio a Sedapal y una
carta remitida a la regidora Maritza Oblitas Romero en contra del alcalde
Rafael Espinoza, para que sustente la descabellada obra. Además, Tinco asegura
que parte de pobladores de El Progreso fueron sorprendidos haciéndolos firmar
un oficio que estaría destinado a “veredas y pistas” y que el municipio de
Carabayllo pretende usar para justificar la construcción de la mencionada
planta.
“Hemos pedido a través de la Ley de Transparencia, y no
figuran ciertos documentos, donde supuestamente la población autoriza a la
municipalidad para ejecutar la obra, y nos hemos dado la sorpresa que de la
misma Gerencia de Medio Ambiente existen tres cartas dirigidas a diferentes
instituciones con diferentes fechas, menos la que nosotros requeríamos, que era
la autorización de Sedapal (carta 018) con la firma de los vecinos que
supuestamente habrían aprobado esa obra”, narra el dirigente vecinal.
“Por suerte, tenemos una copia
donde en realidad no son los vecinos del IV Sector, convocados por la junta
directiva , sino son vecinos convocados a una comisión de “pistas y veredas”
que han sido sorprendidos y han firmado un documento el cual desconocemos
porque no es la totalidad de la población. Aquí
estamos alrededor de 42 comités y una población entre 5 y 6 mil personas”,
concluyen.
Esta es otra perla más del
alcalde Rafael Álvarez atentando contra la salud de los vecinos al pretender
arrebatarles un parque, además de utilizar “leguleyadas municipales” para
sorprenderlos e imponerles una obra que no requieren. Una vergüenza.
Por: Pablo Boggiano
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