Una famila entera se salvaron de morir de milagro, luego de
desplomarse sobre ellos una pared de su vivienda cuando se aprestaban a
celebrar el Día de la Madre.
Eran las 08:30 de ayer, cuando la familia Reátegui Quezada se alistaba para
reunirse en su vivienda ubicada en la cuadra dos del jirón Bartolomé Herrera,
en Comas. En medio de la algarabía, de repente, una pared se les vino encima
quedando todos atrapados.
Esto sucedió en el tercer piso de la vivienda, cuando la familia movía un
ropero hacia el lado izquierdo de la pared.
“Parte del techo y toda la pared aplastó a la familia, quienes pedían auxilio a
gritos y se quejaban por el dolor”, contó un vecino.
La señora Isabel Quezada, de unos 50 años, fue la que llevó la peor parte pues
presenta fracturas múltiples. Entre tanto, su esposo, el militar en retiro
Kinston Reátegui, también resultó con algunas lesiones mientras que sus hijos
Evelyn, Cristel y Omar sufrieron golpes leves, tras el accidente.
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